La secado y almacenamiento de hierbas es una práctica común entre los amantes de la jardinería y la cocina. Las hierbas tienen propiedades maravillosas y pueden ser utilizadas en una amplia variedad de formas, desde condimentos hasta remedios herbales. Sin embargo, si no se secan y almacenan adecuadamente, pueden perder su frescura y potencia. Este artículo le brinda una guía detallada sobre cómo secar y almacenar hierbas de manera efectiva.
Antes de comenzar el proceso de secado de sus hierbas, es importante tener en cuenta que ciertas hierbas tienen diferentes tiempos y técnicas de secado. Las hierbas más carnosas como la menta, el romero y el tomillo necesitan más tiempo para secar que las hierbas suaves como la lavanda y la salvia.
Este es el método más popular y fácil de secar hierbas. Todo lo que necesita hacer es cortar sus hierbas y atarlas en pequeños ramilletes. Si desea colgarlos para secarlos, elija un lugar fresco y seco con buen flujo de aire. Coloque los ramilletes en un área donde no haya luz directa del sol y deje secar durante una semana o dos. No se preocupe si las hojas se caen de las ramas; es normal. Después de que las hierbas estén completamente secas, retire las hojas de las ramas y guárdelas en un recipiente hermético.
Este método es para aquellos que no tienen suficiente espacio o tiempo para secar hierbas al aire libre. Precaliente su horno a 90°C. Lave y seque bien sus hierbas, luego colócalas en una bandeja para hornear. Asegúrate de no sobrecargar la bandeja para hornear para que las hierbas se sequen de manera uniforme. Deje las hierbas en el horno durante una hora o hasta que estén crujientes al tacto. No las deje en el horno durante más tiempo, ya que pueden perder su sabor y aroma. Después de que las hierbas estén completamente secas, guárdelas en un recipiente hermético.
Después de secar sus hierbas, es importante almacenarlas correctamente para mantener su frescura y sabor. Aquí hay algunas pautas a seguir:
La humedad es el enemigo de las hierbas secas. Asegúrese de almacenar sus hierbas en un recipiente hermético y guárdelo en un lugar fresco y seco. Esto impedirá que la humedad ingrese y arruine el sabor y aroma de sus hierbas.
Almacenar las hierbas enteras es mejor que molerlas antes de almacenarlas. Las hojas y ramas enteras mantienen mejor su sabor que las trituradas y molidas.
Es fácil olvidar qué hierbas están en cada contenedor, por lo tanto, etiquetarlos es importante. Use etiquetas de papel o imprime etiquetas para que pueda identificarlas con facilidad.
No mezcle diferentes hierbas en el mismo contenedor. Cada hierba tiene un sabor y aroma diferente y mezclarlos puede arruinar su sabor y aroma.
Mantener el sabor y la frescura de sus hierbas después de secarlas es muy importante. Siguiendo las pautas de secado y almacenamiento adecuadas, puede disfrutar de las propiedades beneficiosas de sus hierbas durante todo el año. Además, tener tus propias hierbas secas en casa es una forma maravillosa de darle un sabor fresco y aromático a tus platos y bebidas favoritos.